LOMO EN MANTECA COLORÁ.

El lomo es una pieza determinada del cerdo, pero como suele salir algo más seco, vamos a usar un buen magro.

Ingredientes:

     - 1 Kg y 1/2 de magro de cerdo, en trozos de unos cuatro centímetros.
     - 1 Kg y 1/2 de manteca de cerdo en pella.
     - Aceite de oliva virgen extra.
     - 5 hojas de laurel.
     - Orégano.
     - Tomillo.
     - 2 cabezas de ajos.
     - 3/4 de litro de vinagre.
     - Pimentón dulce.
     - Sal.

Preparación:

Vamos a preparar el aliño para la carne.

En un recipiente grande, echar el vinagre, una cucharada sopera de orégano, otra de tomillo, romper las hojas de laurel con las manos y agregarlas, machacar los ajos enteros y echarlos, una cuchara sopera de sal y dos de pimentón.


Remover y agregar la carne para que vaya cogiendo el aliño, añadir un poco de agua para que cubra algo más. Volver a remover.

Guardar en el frigorífico durante unas 24 horas, pero conviene tapar el recipiente con plástico de cocina.

En ese tiempo se le debe dar la vuelta a la carne.

Ahora vamos a la tarea de verdad.

Cortar la pella de manteca en trozos de unos cinco centímetros.
Poner una cazuela grandecita al fuego con medio dedo de aceite.
Añadir la pella troceada y dejar derretir a fuego medio.
Remover de vez en cuando y cuidado con las salpicaduras.

Escurrir la carne pero conservar el aliño.
Sazonar un poco la carne y echarla a freír en la manteca.
Diez minutos más tarde, agregar el aliño colado.
Dejar freír, mientras se irá evaporando el aliño, al menos hora y cuarto.
Probar la carne para comprobar si está terminada.

Apagar del fuego y retirar.

Debemos sacar la carne a otro recipiente.
A la manteca le podemos dar más color agregando un par de cucharadas soperas de pimentón, remover para repartir,  y luego echar la manteca sobre la carne.

Lo restillos que quedan en el fondo de la olla, y un poco de manteca, la echamos en otro cacharro y tendremos una zurrapa para el desayuno, de escándalo.

Una vez cuajada la manteca se deberá guardar en el frigorífico.

Se puede servir loncheado frío o caliente, acompañado de un poco de manteca.

Si lo ponemos frío, con unas patatas recién fritas por encima, tendremos un contraste muy acertado y un aperitivo muy rico.